El pasado sábado 19 de mayo, el Seminario de Literatura Ana Pelegrín encontró una nueva excusa para reunirse. En esta ocasión, nuestro encuentro se producía en el Centro de Arte Tomás y Valiente de Fuenlabrada, para acompañar con un taller de promoción a la escritura creativa a nuestros compañeros y compañeras del grupo de Acción Educativa: Enterarte.
Enterarte es un grupo creado principalmente por docentes de la educación Infantil, Primaria y Secundaria que propone proyectos de plástica y arte alternativos, bianuales, que en ensayan en sus centros escolares y que concluyen, cada dos años con una exposición que integra los trabajos resultantes de todos estos centros educativos.
En esta ocasión la exposición que han realizado lleva por título Ser en el tiempo y las propuestas con las que los distintos centros colaboraban, rendían homenaje a un concepto del tiempo que se correspondía con distintos y llamativos enfoques. La exposición ha tenido un período de apertura del 10 al 24 de mayo. Es un ejemplo muy valioso de trabajo creativo e inclusivo del alumnado de los distintos centros.
Valgan como testigo de lo que allí encontramos unas cuantas fotos...
Los talleres propuestos se desarrollaron entre las 11´00 y las 14´00 del mediodía. Tres de ellos eran propuestas del colectivo Enterarte: "Siluetas", "Tiempo por un tubo" y "Traza tiempo". El CEIP Trabenco llevó a cabo el taller "Tiempo de batucada":
"Las ínsulas extrañas" desarrollado por el Seminario de literatura Ana Pelegrín y como colofón a los talleres se llevó a cabo una pequeña representación teatral para bebés titulada "Déjame adivinarte"
y un pequeño concierto y cuentacuentos.
"La isla del día de antes" aparece retratada en la Breve guía de lugares imaginarios de Manguel, en Alianza. Es una isla inaccesible, sin tiempo.
Situados en nuestra pequeña barquichuela, avistamos en la lejanía esta extraña isla que contenía a su vez otras islas, a estas sí podíamos acceder.
Los niños y niñas se acercaban sorprendidos por la extensión azul del océano y...
¡Os invitamos, amigos y amigas a echaros la a mar, a haceros marineros"
Con un sencillo ejercicio de papiroflexia los niños y niñas construyeron pequeños barquitos de papel y se dibujaron dentro de su embarcación. Cada barco colmaba su expresión con un pareado que contenía su nombre, por ejemplo: "Me llamo Itziar y me echo a la mar para poder navegar", "Me llamo Jon y me echo a la mar, para jugar al fútbol con un calamar"...
Cada niño, cada niña, cada padre y cada madre pinchaba su embarcación en el mar y comenzaba entonces su viaje entre las islas: La isla del tesoro los condujo al pareado con preposicón: "A la isla del tesoro...", "Ante la isla del tesoro...", "Bajo la isla del tesoro...", "Por la isla del tesoro...", "Tras la isla del tesoro..."
En la lejanía se alzaba La isla de la desesperación. A esta isla cada escolar era conducido con el apellido de Pierdedías, de manera que en forma de cuarteto podían jugar a viajar en un trasatlántico, una chalupa, una galera...
Verónica Pierdedías
subida en un navío,
llegó con alegría
a la isla de su tío.
Raúl Pierdedías
montado en una falúa
llegó con alegría
a la isla que no evalúa.
Mario Pierdedías
remando en una piragüa
llegó con alegría
a la isla sin agua.
Y rima que te rima, algún osado más llegó a toparse de golpe con La isla de rojo coral...
Pero en la lejanía, si mirabas atento te llegabas navegando a la Isla de Eolo. Una isla que contenía palabras, palabras que sopladas por el viento se (des)organizaban en extraños poemas dadaístas...
Lo que algunos advirtieron y otros no, fue que un discreto Rafael Alberti, anduvo espiando el acto toda la mañana, desde un vértice del azul océano...
Fantástico día y trabajo! Con este calentamiento...La Escuela de Verano será todo un éxito...Viva la Acción Educativa, una manera diferente de aprender, una manera diferente de enseñar...
ResponderEliminarHermoso trabajo. Enhorabuena!
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